Un poco de nuestra historia
¿Cómo empezó todo?
Para quienes no me conozcáis, soy Elvi. Y Aquelarre es un sueño hecho realidad.
Siempre me ha gustado tejer, desde que mis abuelas me enseñaron siendo una niña, pero jamás imaginé que haría de ello mi profesión.
Soy licenciada en Biología por la Universidad de Oviedo y aunque, por circunstancias de la vida, nunca ha sido mi profesión, la biología es otra de mis pasiones.
Al convertirme en mamá, algo cambió dentro de mi. Supongo que a todas nos pasa. Pasaban los años y sentía que las cosas no estaban yendo como yo quería que fuesen. Decidí que quería conciliar (esa palabra imposible) y, además, quería dedicarme a algo que me hiciese tener ganas de madrugar cada lunes.
Así que dejé mi último trabajo como frutera en un supermercado y me lancé al vacío sin saber muy bien si esto saldría bien.
Y así nació Aquelarre. Muchas personas preguntan el por qué del nombre. ¿Qué tiene que ver un aquelarre, es decir, una reunión de brujas y brujos, con la lana? Pues para mi fue fácil, no creas que me lo pensé demasiado, fue una de las cosas que más claras tenía desde el principio. Aquelarre es un lugar para tejer. No es sólo una tienda de lanas sino un espacio donde reunirse y compartir nuestra pasión por el punto y el ganchillo. Y lo de las brujas pues bueno…quien no crea que lo que hacemos con las agujas es magia, es que no ha entendido nada.
Así que aquí estoy, desde 2019, al frente de mi negocio que poco a poco y con mucha dedicación y trabajo va superando pandemias, crisis y todos mis errores (y también algún que otro acierto)